En el interior de esta capilla se encuentra una Colección de nueve cuadros, inspirados en cartones de Rubens, con el tema de la Apoteosis de la Eucaristía.
Uno de los casos más
significativos del pintor Pedro Pablo Rubens fue su producción de veinte
cartones que con el tema de la Apoteosis de la Eucaristía realizó en torno a
1622-1625 por petición de la infanta Isabel Clara Eugenia, hija de Felipe II y
gobernadora de los Países Bajos, para ser trasladados a tapices monumentales
destinados al monasterio de las Descalzas Reales de Madrid, ocupado por monjas
clarisas desde que fuera fundado en 1559 por Juana de Austria, hija de Carlos V
y hermana de Felipe II, por el que la infanta sentía una especial predilección.
Su finalidad era decorar y
realzar el convento en las grandes solemnidades, como en la celebración del
Corpus Christi.
En este caso, los tapices fueron
elaborados en Bruselas en el prestigioso taller de Jan II Raes, entre 1627 y
1632, y posteriormente enviados a la Corte española, conservándose todavía la
serie en dicho convento madrileño.
Los nueve cuadros son los
siguientes:
EL CARRO DE LA FE
Este cuadro se titula « El Triunfo de la Fe católica sobre la ciencia, la filosofía, la naturaleza y la poesía», dispuesta sobre un carro triunfal, empujado por Ángeles, lleva en su mano izquierda el cáliz con la Sagrada Forma simbolizando a la Eucaristía; y en sus pies un globo terráqueo en alusión a la universalidad de la Fe.
En
el aire portan los emblemas de la
Pasión. Detrás del carro, cautivos de la Fe: La Ciencia, portando un
astrolabio; la Filosofía, con los rasgos de Sócrates; la Naturaleza, con
numerosos senos y la Poesía, coronada de
laurel.
LOS PANES DE DAVID
Dos ángeles recogen la sangre redentora en un cáliz; otro de espaldas se la da a beber, tal vez a la Virgen, junto a la que se arrodilla compungidamente una joven, que puede representar a María Magdalena.
Arriba
Dios Padre, con su mano derecha abierta, observa la escena y a la paloma del
Espíritu planear sobre la cabeza del Hijo.